«Jaén, aún en mi mente pese a la distancia»

Os hablaré de la tierra que me vio crecer, el pueblo que me dio ganas de cambiar el mundo, este es, Jaén.

No muy grande, pero, tampoco tan pequeño, entre cuestas y olivos vivimos los jiennenses, gentes que regalan hospitalidad, destilan cariño y dan gratos recuerdos a todos aquellos que vienen a Jaén. Dice un refrán: “A Jaén se entra y se sale, llorando”. Llorando entran, de la pena que les dió dejar su tierra y llorando salen, por el mismo motivo, pero esta vez con Jaén en el corazón.

Jaén, ese pueblo grande o ciudad pequeña, ese catetismo que sin ánimo de dañar, impide la apertura de las mentes, produciendo el quiero y no puedo.

Jaén, proviene del árabe, Xauen, que significa, cruce de caminos, eso es Jaén un cruce en el que se unen todos los defectos y virtudes de una ciudad y de un pueblo, sin aún decantarse por uno u otro modelo, debido a que todavía, los jienenses no han planteado sobre la mesa un proyecto de futuro para Jaén, ni en una, ni en otra dirección, es por eso que sigue siendo un cruce de caminos.

Mujeres siendo tratadas como objetos

Todo ha empezado cuando, desgraciadamente, se me ha ocurrido ver un videoclip de una canción, dirigida en gran medida a adolescentes discotequeros con las hormonas a flor de piel. Y no he podido más. He tenido que parar el vídeo y comenzar a escribir esto.

¿Desde qué temprana edad comenzamos en esta sociedad a inculcarles a nuestros menores la idea de la mujer como un objeto? La idea de aquella mujer que ha de estar guapa para que la tomen en serio: ha de maquillarse para sentirse bien consigo misma,  andar en tacones, enseñar sus largas piernas; la idea de aquella mujer que tiene como pareja al hombre emprendedor.

¿En qué momento superaremos toda la sociedad el tratar a las mujeres como seres inertes? Mientras las mujeres sean tratadas como objetos, será imposible tratarlas como lo que son, sujetos.

Paz y amor, pero para algunos

 Siempre he oído a la gente afirmar su sentimiento de orgullo por ser español/española, lo que siempre me ha parecido absurdo porque tu lugar de nacimiento no es una decisión propia. ¿Porqué enorgullecerte de algo que  no has decidido? Este sentimiento a veces  se extiende más absurdo todavía a  Europa, habiendo gente que siente  orgullo y amparo hacia la Unión  Europea. Eso ya sí que me parece  fuerte, porque ahí directamente Felipe  González nos metió en la CEE y  nos mantuvo en la OTAN sin que la gente    supiera lo que significaba  realmente. Sobre todo con la OTAN cometió uno de los mayores errores de su trayectoria, como el mismo ha reconocido: ‘’Fue un error serio, serio…A los ciudadanos no se les debe consultar si quieren estar o no en un pacto militar. Eso se debe llevar en los programas y se decide en las elecciones’’ Claro, quién le hubiera votado si lo hubiera llevado en el programa y hubiera hecho campaña a favor. Así que para el referéndum cambió su postura del ‘’No a la OTAN’’ por ‘’Votar a favor de la OTAN o dimito’’, y ahí costaba más oponerse. Por ello, no sería del todo incorrecto decir que el PSOE manipuló a la sociedad para meter a España en la OTAN. Y sí, hay gente que aún así siente orgullo de que España esté integrada en la Comunidad Internacional, aunque ésta misma nos incluya en los ‘’PIIGS’’ y no dejen de jodernos. Además, luego esa misma gente va de pacifista, a la vez que ve bien que España esté en la OTAN. Vaya, en qué quedamos. Todos sabemos que en el fondo, a nadie le gusta meterse en guerras. ¿O sí?

Visibilidad y realidad lésbica

 Tras el gran revuelo mediático organizado en torno a la salida del armario de la Miss  España Patricia Yurena y su relación con la Dj Vanesa Klein, me acude a la mente una  cuestión crucial ya no sólo para el colectivo lésbico sino para el grueso de la sociedad  española en general.

Diariamente la inmensa mayoría de los españoles, grandes consumidores de tele basura  y aficionados a las redes sociales, son testigos de la integración del hombre homosexual  en el mundo televisivo, el ámbito musical, incluso abriéndose camino en el universo  deportivo. Los hombres que representan ese arquetipo de homosexual que los españoles  asimilan sigue una serie de rasgos: es un hombre atractivo,  culto, con carisma,  en  general el modelo a seguir incluso para los heterosexuales. En cambio ¿Cuántas mujeres  de cierta relevancia social se han declarado abiertamente lesbianas?  ¿Por qué esas  mujeres hacen invisible su condición sexual?

Un año más para nosotros, un año menos para ellos

A veces uno piensa en los entresijos de la vida como algo inexpugnable, como algo casi mítico, desconocido e impredecible. Siguiendo este principio, todos los propósitos que nos hacemos para la llegada del nuevo año son improbables o, como poco, absurdos. Lo cierto es que son metas que podemos proponernos o alcanzar en cualquier etapa del año, en cualquier instante y en cualquier lugar, sin embargo, preferimos inmiscuirnos en la ilógica navideña y creer que en la divinidad de las fechas que cambian el año de número estará la llave que encierre al genio de la lámpara. Y es que la ilusión es lo que, en última instancia, mueve al ser humano. La esperanza es lo último que se pierde, reza un refrán popular, y esta frase no puede dar más en el clavo, nos limitamos a echar mano de un principio místico para arreglar algo que aún no hemos podido arreglar, para fijar un objetivo inalcanzable en el año anterior pero que por una extraña razón nos vemos más capacitados para llevar a cabo únicamente por la fecha en la que promulgamos el deseo. Y todo esto en una etapa en la que debería dominar la razón. Pero no, la razón no domina, la razón es esquiva para la sociedad, como la convivencia para Estados Unidos o las injusticias para el Ejecutivo español.

Crítica a los cuentos tradicionales

Por si no nos hemos dado cuenta ya, los cuentos infantiles que se leen a los niños/as, tienen un corte rematadamente machista, relegando a la mujer tras el príncipe o antes de la llegada del macho varas tras su padre.

También cabe destacar la omnipotentemente bien explicada situación del reino ideal gobernado por una familia real, en donde los aldeanos no tienen papel alguno en el gobierno y se toman las decisiones tiránica y despóticamente en las salas de palacio, en vez de en asambleas o parlamentos de manera democrática, pero son felices igualmente a pesar de valer igual que un esclavo.
Y con lo anterior quiero añadirle que es clara y obvia la estratificación social, ya no del pueblo, ni de la gente , sino de los personajes , cada uno tiene su rol y su objetivo y no se pueden salir de ambos, esto implica la aceptación por los personajes de su destino , por ejemplo el poder y la virtud reside en la monarquía y el clero y el mal es todo lo demás,nadie lucha por cambiar eso , a los antagonistas no les dan la posibilidad de poder explicar sus vidas simplemente se les juzga por sus acciones , a los protagonistas los conocemos desde el principio de la historia y solo conocemos sus buenas acciones y buenos momentos de los malos ni se menciona , pues no todo en la vida aunque lo queramos idealizar al máximo es totalmente bueno.
En especial veo que si se quiere romper con el tradicionalismo del esquema argumentativo rey y reina tienen una hija, la princesa encuentra príncipe, la bruja aparece le gusta el príncipe, intenta arrebatar el príncipe a la princesa y finalmente el príncipe sin conocer a ninguna de las dos por la cara bonita o la riqueza de la princesa, se queda con la consorte y rechaza a la bruja o demás antagonistas posibles.
Quizás y solo quizás la bruja no sea tan mala , sus actos evidentemente son desde el punto de vista que los explican crueles y también un tanto difícil de entender pero pensad en obtener algo, que ,tienen tan fácil la princesa por su condición de miembro de la realeza, ante ese poder de la monarquía solo le queda el camino violento o el de las trampas u otros medios no muy bien vistos 
Creo que la bruja aunque sea la bruja es una persona y se merece ser feliz , llegar a cumplir su sueño de estar junto al príncipe.

La Revolución Francesa y la justificación ideológica del racismo

Pese a que hoy en día la Revolución Francesa está considerada como el mayor acto de libertad en la historia de la humanidad, la misma tiene sus sombras, y no son pequeñas. Durante esta rebelión tuvo lugar, probablemente, la mayor justificación ideológica por parte de un grupo de intelectuales del racismo, la discriminación y la inferioridad del hombre negro. Algunos de los autores nombrados son Rousseau, Montesquieu, Voltaire, Diderot… e incluso miembros de la propia Asamblea Nacional Francesa. Todos ellos se referían a la comunidad afroamericana como “animales”, “bestias de carga”, “burros” o “mulas”. Quizás, esta Revolución no fué tan heroica al fin y al cabo, ya que la libertad dependía del color de piel.